Ingredientes:
– *Texturizado de soja.
– Majado de ajo, perejil, avellanas y pan frito.
– Champiñones.
– Aceite, ajo, finas hierbas, tomillo, laurel, perejil, sal, salsa tamari (o de soja) harina y vino blanco.
Elaboración:
En realidad es la tradicional receta de pollo al ajillo en la que el pollo se sustituye por el texturizado de soja. Hay que remojar la soja texturizada 1 hora en agua con una cucharada de soja, luego se escurre bien, se enharina (recomiendo harina de garbanzos, aunque vale cualquiera) y se fríe. Mientras tanto, en una sartén honda sofreímos los champiñones con los ajos, el laurel y el resto de hierbas en aceite de oliva moderadamente caliente. Una vez que están todos los ingredientes juntos se añade el vino blanco y se deja reducir. Finalmente se le pone el majado y la soja texturizada, dejamos que maride 5 minutos y listo.
Si queremos que deje una mayor cantidad de salsa porque somos unos tremendos glotones que no podemos vivir sin mojar pan, se puede añadir un poco del agua con soja en la que se ha rehidratado el texturizado y media cucharadita de marmite**.
*Nota: El texturizado de soja lo puedes comprar en tiendas especializadas, tiene varias versiones y tamaños, es económico, muy rico en proteínas y muy versátil, de hecho vamos a muchas recetas y trampantojos hechos con texturizado.
**Nota 2: Marmite es un preparado vegano a base de levadura de cerveza fermentada y enriquecido con vitamina B12 que está para chuparse los dedos. En el Reino Unido es una salsa muy conocida y la usan incluso para untar tostadas.