Ingredientes:
– 200 g de tempeh (en mi caso usé uno de garbanzos).
– 8 champiñones (a los que he llamado agaricus para darme el pisto).
– 5 dientes de ajo.
– 1 cerveza.
– 1 machado de avellanas, cilantro y ajo crudo (también le añadí unas regañás de espelta que le van tanto como los costroncitos de pan frito).
– 2 cucharadas de salsa de tomate.
– 1 hoja de laurel.
– 1 chorrito de tamari.
– 1 cucharadita de marmite.
– 1 puñadito de preparado para burritos (sustituible por las especias que más te gusten).
– Finas hierbas, pimienta (molida y en grano), sal, ajo en polvo, cebolla en polvo y aceite de oliva.
Elaboración:
En una cazuela o sartén honda rehogamos los champiñones en láminas, los ajos y el tempeh en daditos, cuando esté cocinado añadimos el tomate, la cerveza, las especia y dejamos que se cocine hasta que reduzca un poco, finalmente le añadimos el machado, tapamos y dejamos que repose 5 minutos con el fuego apagado. Preparamos una buena hogaza de pan para mojar, porque la salsa está de muerte, y a zampar.
Nota: Si no encuentras el tempeh de garbanzos le puedes poner el normal, tofu, seitán, garbanzos…, hay casi tantas ollas como días…