Ingredientes:
– 1 taza de soja texturizada menuda.
– 1 berenjena.
– 1 puñado de avena remojado en veche de avena (u otra veche vegetal que no sea dulce)
– 1 cebolla.
– 2 ajos.
– 1 rama de perejil.
– Especias al gusto (yo le puse orégano, finas hierbas, tomillo, pimienta y pimentón).
– Harina de garbanzos (para rebozar las albóndigas), o pan rallado, o el rebozante que más te guste.
– Aceite de oliva (para freír las albóndigas) y sal.
Para la salsa de champiñones:
– 8 champiñones frescos (o un botecito en conserva)
– 1 pimiento verde.
– 1 cebolla.
– 1 zanahoria.
– 2 ajos.
– Laurel, pimienta, sal, finas hierbas.
– Vino blanco.
Elaboración:
Para hacer las albóndigas lo primero es trocear y asar la berenjena con un poco de agua, aceite y sal (también se puede hacer en el microondas). Por otro lado calentamos agua en una olla (yo le puse caldo de verduras, si tienes pónselo, le dará más sabor) y ponemos la cebolla partida a la mitad, dos ajos, tomillo, orégano y las finas hierbas, y cuando hierva añadimos la soja texturizada menuda. Dejamos que se cueza todo junto unos 15 ó 20 minutos, hasta que esté blandito, colamos para eliminar todo el líquido y reservamos hasta que se atempere. Por otro lado remojamos la avena en veche de avena (o la leche vegetal que más te guste), mezclamos la berenjena (ya asada y estrujada con el tenedor), la soja (ya atemperada), y la avena (ya remojada); añadimos un poco más de tomillo, orégano, pimentón dulce, 2 ajos picados, la rama de perejil también picada y revolvemos todo junto hasta que los ingredientes queden integrados perfectamente (si no te queda muy consistente le puedes añadir, así como sugerencia, un poco de pan rallado, levadura de cerveza o unos copos de puré de patatas instantáneo). Formamos las albóndigas, las rebozamos en harina y freímos en aceite de oliva bien caliente.
Para la salsa de champiñones es tan sencillo como sofreír los champiñones y reservar (se añaden al final, aunque yo no tenía y le puse de bote, así que este paso te lo puedes saltar), en ese aceite pochamos 1 cebolla, 1 ajo, 1 zanahoria, 1 pimiento, especias al gusto (yo le puse pimienta, laurel y finas hierbas), cuando esté dorada la verdura añadimos un poco de harina para espesar, 1/2 de vino blanco (que dejaremos evaporar unos minutos), caldo de verduras (o agua, yo tenía caldo de de cocido vegano y lo aproveché) y un botecito de champiñones, oro de guisantes y otro de aceitunas rellenas de pimiento (si te gustan). Finalmente se puede agregar un majado de avellanas, ajo y perejil o una cucharada de marmite (mostaza, miso…, lo que seas capaz de imaginar degustativamente y te sepa rico).
Nota: también quedan deliciosas con una salsa de tomate casera.
Nota 2: se puede acompañar con unas patatas cubo (de hecho yo lo hice) y darle más potencia de sabor con marmite diluido en agua (le va que ni tintao).
Y si te sobre masa, como me ocurrió a mí, puedes hacer unos deliciosos filetes rusos…