
Ingredientes:
– El relleno que más te guste (yo le puse champiñones, aceitunas, cebolleta y especias, pero si quieres lucirte prueba con un relleno de ciruelas pasas, dátiles, avellanas, almendras, anacardos, castañas cocidas, cebolleta y especias…)
-1 vaso de cava o vino blanco.
– Aceite de oliva, pimienta y sal.
Para la salsa unos champiñones, cebolla, 1 vaso de cava o vino blanco y salsa de druida (marmite diluido en agua) o tamari.
Elaboración:
Una vez que tenemos la bola de seitán lo estiramos con el rodillo hasta hacer una lámina más o menos rectangular (al principio parece un poco indomable, porque el seitán es elástico, pero poco a poco se va doblegando), lo rellenamos, lo embridados (o si eres mañoso, con envolverlo cuidadosamente vale), lo llevamos al horno en una cazuela de barro, le ponemos el cava o vino blanco, un chorrito de aceite y en unos 45 minutos (depende del tamaño y el horno) a 180 grados lo tenemos listo para servir.
Para la salsa de champiñones pochamos la cebolla, añadimos los champiñones, el vaso de cava o vino blando y al final, cuando ya esté cocinado y con el fuego apagado, la salsa de druida. Podemos añadir un poco de harina de maíz diluída en agua para espesar la salsa si queda muy ligera.