
Ingredientes (da para ocho suspiros):
– 1 cucharada de masa madre.
– 50 g de azúcar integral.
– La ralladura de la piel de 1 limón y 1 naranja.
– 100 ml de bebida vegetal.
– 50 g de margarina vegetal.
– El zumo de 1 naranja pequeña.
– 10 gr de levadura fresca de panadero.
– Una pizca de sal.
– Media cucharadita de vainilla (opcional, tb puede ser agua de azahar).
– 150 g de harina de fuerza.
– 150 g de harina de trigo.
– 1 cucharadas soperas de aceite de oliva.
Elaboración:
Ponemos a calentar la bebida vegetal (yo le puse de soja pero le va bien cualqueir otra) con la ralladura de la piel de un limón y una naranja. Mientras se aromatiza la veche, batimos el aceite de oliva con el azúcar y el zumo de naranja. Le vamos incorporando la margarina y la levadura. Añadimos la masa madre y la mitad de las harinas sin dejar de remover para que nos quede un acabado suave y terso. Lo dejamos reposar unos minutos y agregamos el resto de las harinas y dejamos que repose un poco más, hasta que doble su tamaño. Damos forma a estos panecillos (o lo que más nos mole) y los rellenamos con el cabello de ángel o la confitura para darles la textura tradicional que buscamos (también puede ser con compota de manzana o chocolate, como hice yo, o no rellenarlos y simplemente pintarlos con veche de soja y azúcar, o mitad y mitad, o como quieras). Por encima podemos decorar con las pasas, nueces, almendras fileteadas, o una guinda. Pintamos con un poco de bebida vegetal y horneamos a 180º unos 35 minutos.
Nota: Si se te va la mano con el horno y te quedan un poco duros lo mejor es abrirlos por la mitad y ponerles mermelada, cabello de ángel, compota de manzana, o si te apetece los puedes emborrachar un poco con whisky, coñac o ron.