Ingredientes:
– 1 cebolleta.
– 1 pimiento verde.
– 1 zanahoria.
– 1 ajo.
– 1 trocito de apio.
– 4 champiñones.
– 1 tomate.
– 1 cucharadita de alcaparras.
– 1 taza de aceitunas verdes sin hueso.
– 1 lata de guisantes.
– Caldo de verduras (o en su defecto agua).
– 2 tazas (o un tazón) de cebada perlada.
– 1 chorrito de vino blanco y otro de tamari (o salsa de soja).
– Sal, pimienta, jenjibre rallado, limón, aceite de oliva y una hojita de laurel.
Elaboración:
Se sofríen la cebolleta, el pimiento verde, la zanahoria, el apio, las aceitunas verdes en rodajas, las pocas alcaparras, los champiñones en láminas, el ajo y el tomate (todo muy bien picadito), se salpimenta, se le pone un poco de jengibre rallado y unas gotas de limón. Cuando todo esté bien sofrito y huela rico se añade la cebada (previamente remojada alrededor de una hora), se agrega un chorrito de vino blanco y medio de tamari, se remueve hasta que evapore y finalmente se añaden los guisantes (una latita) y el caldo de verdura hasta que la cebada esté al dente (se puede añadir para potenciar el sabor un poco de pasta de miso rojo, marmite o un chorrito más de tamari, aunque a mí lo que me gusta ponerle son unas gotas de limón.
Nota: este guiso queda igual de rico con avena, centeno, o el cereal que más te guste, incluso, por decir una originalidad, con arroz.